
Es un pésimo primer día en el trabajo de Nina Blackman, cuando un paciente, loopy de la anestesia, la muerde. Por lo menos era lindo. Pero para el verdadero drama que no puede vencer a la noche siguiente.
Nina se despierta con un conjunto de maquinilla de afilados colmillos, la visión biónica, el oído supersónico, y el gusto por la sangre. Pero hay una buena explicación: Su paciente, de Long Island, o el vampiro Greg Statleon. En realidad son el uno para el otro, si Nina está dispuesto a comprometerse a un hombre para la eternidad.
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